Quiero hablar hoy de la utilidad y las aplicaciones de la terapia psicológica porque desafortunadamente y a pesar de que estamos viviendo en pleno siglo XXI existen personas que pudiendo beneficiarse con la ayuda que dan este tipo de tratamientos, se condenan a un sufrimiento más prolongado y lastimoso por condiciones que les ha tocado vivir en muchas áreas de sus vidas, como ejemplo, recuerdo una paciente que sufrió de depresión más de dos años ya que cuando el esposo le decía “vamos al psicólogo” ella le respondía “yo no estoy loca” y efectivamente, ella no estaba loca pero si padecía de depresión y fue el leer un artículo mío acerca de la depresión cuando comprendió que los psicólogos no son para “locos” y que la depresión la puede sufrir cualquier persona y que tiene cura.

Otras condiciones que sin considerarse enfermedades o trastornos emocionales, que pudieran ser beneficiarias del tratamiento psicológico pudiéramos mencionar los casos de baja autoestima en jóvenes, ya que esto es algo que los afecta en su desenvolvimiento social y de manera indirecta en el aprovechamiento escolar, además debemos tener bien presente que una joven o un joven con problemas de autoestima baja, está en riesgo de hacer una inadecuada elección de pareja o carrera.

Debemos mencionar también aquí los casos de inseguridad, casos de bajo rendimiento escolar o incluso en adultos, podemos ver el caso de hombres adultos jóvenes, desempleados por reajuste laboral, con problemas de depresión enmascarada y que por no tratarse emocionalmente se hunden en un pozo sin salida y algunas veces usando el alcohol como una puerta fácil.

Está también el caso de personas, tanto hombres como mujeres que en relación tras relación viven los mismos problemas de pareja de manera repetitiva, con la sensación de estar siempre viviendo lo mismo y creyendo la persona que esa es la suerte que le tocó o el tipo de personas que atrae y no son más que estereotipos que vamos arrastrando por experiencias pasadas y que la terapia psicológica nos puede ayudar a cambiar de manera definitiva para ya no seguir repitiendo patrones de conducta.

Y por último quiero mencionar el caso de algunas enfermedades físicas que tendrían mejor pronóstico o evolución si aparte de ser tratadas por un médico general o especialista, la persona fuera tratada por un psicólogo clínico y estas son las siguientes:

Diabetes, cardiopatías, los diferentes tipos de cáncer, pacientes con estrés, pacientes con insuficiencia renal crónica y todos los pacientes con enfermedades crónico degenerativas y pacientes con obesidad resistente.

Recuerda que la terapia psicológica te ayuda a sanar heridas del pasado, a iniciar una nueva etapa en tu vida con una actitud diferente a la que hasta ahora has tenido, con una actitud de logro y de éxito, una actitud de triunfo, que te lleve a darte cuenta que también tienes derecho a ser feliz.

Lic. Fernando Nagao Quiñones